REFLECTANTES.
Jonathan Carvallo Salas.
Librer'ia
07.09.2023
Carvallo invita al espectador a experimentar su obra a través de un teléfono celular. Gracias a la luz que emite el dispositivo, el material reflectante alcanza la luminosidad característica de lo digital en una obra analógica. Con esa acción, dos de las investigaciones cardinales de Carvallo se encuentran, el estudio de la luz, tema tradicional dentro de las artes plásticas, y la experimentación con material autoadhesivo como técnica expresiva. Resulta paradójico que, con este acto equivalente a un revelado, algunas figuras aparecen y otras desaparecen. El dispositivo celular, que en muchos casos incorporamos a nuestro sistema perceptivo, nos vincula y desvincula de la imagen produciendo percepciones alteradas.
Las obras, una sucesión de piezas de pequeño y mediano formato, forman parte de una instalación monocromática de pequeños elementos plateados, produciendo una superficie homogénea de reflejos de luz. El artista alude a los modelos inmersivos contemporáneos produciendo, nuevamente, efectos sensoriales asociados a lo digital. Podríamos conectar estas situaciones con los cuartos infinitos de Yayoi Kusama, artista japonesa precursora de los ambientes inmersivos, que desafían nuestra percepción del espacio a través de la luz, los reflejos y los juegos ópticos.
Las primeras obras, coloridos collages bidimensionales que combinan material reflectante, tirro, dibujo y pintura, se intensifican al devolver la luz llamando nuestra atención. Carvallo Incluye en sus composiciones elementos y figuras que identifican el ecosistema venezolano. Matas de plátano (recurrentes en su lenguaje plástico y que simbolizan un elemento que delimita los linderos y la territorialidad), animales locales, figuras humanas, tanques militares, máscaras primitivas y personajes monstruosos, naves y exploradores espaciales. Su lenguaje plano y la presencia de follajes tropicales, nos recuerda sutilmente, a los paisajes selváticos y primitivos de Henri Rousseau, pero a diferencia de este, que nunca dejó Paris y que parecía anhelar con sus obras mundos fantásticos y lejanos, Carvallo se desenvuelve en Venezuela, rodeado de la dicotomía entre lo natural y lo tecnológico, de paisajes exuberantes y realidades, a veces, inverosímiles que aparecen reflejadas en sus collages. En las piezas que siguen, el color empieza a desaparecer para dar paso a obras de brillos tornasolados y holográficos, destellos de luz como los que se ven en la superficie del mar o en las pieles plateadas de los peces cuando son alcanzadas por el sol. Reflejan la luz, encegueciéndonos e hipnotizándonos cuando los contemplamos.
Jonathan Carvallo Salas.
Jonathan Carvallo. Caracas, 1973. Licenciado en Artes Plásticas, Mención Escultura del Instituto Universitario de Estudios Superiores de Artes Plásticas Armando Reverón (2000-2005), y anteriormente en Derecho, Universidad Santa María (1995-2000).
Participa en numerosas exposiciones colectivas en varias ciudades de Venezuela, Italia, y España. Destacan las exposiciones en espacios institucionales en Caracas tales como Centro Cultural Chacao (2014-2017), Galería de Arte Nacional (2006), Museo Alejandro Otero (2006), Museo Jacobo Borges (2006), Museo de la Estampa y el Diseño Carlos Cruz-Diez (2005), Museo de Bellas Artes (2005), Museo de Arte Contemporáneo Sofía Ímber (2007- 2012).
y en diversos salones tales como Salón Pirelli de jóvenes artistas, Museo de Arte Contemporáneo de Caracas (2007) entre otros. Actualmente desarrolla proyectos colaborativos de videoarte e Instalación entre los que destaca Inmersión Residual (previamente Arte y Surf), expuesto en el Centro Cultural Chacao (2017-2018) y más recientemente en la Galería GBG Arts (2023).
Entre sus exposiciones individuales encontramos Mutabilidades artísticas, históricas y legales, Galería 39 (2019), Entre Caracas y la Guaira, Centro Cultural Chacao (2017); Entre el Mar y la Ciudad, Galería 39, Caracas (2015); Policías Acostados, Museo de Arte Contemporáneo, Caracas (2012); Oliveros, Sulmona, Italia (2009); Ley Territorial del Plátano, Bar El Patio, Caracas (2008). Obtiene el Tercer premio en el Salón Alejandro Otero (2008), Premio ciudadano Dycvensa (2005); y Mención de honor en el Salón Juan Lovera (2004).